Las pizzas son algo inseparable de la cultura italiana. A pesar de que el país transalpino tiene buena parte del mejor y más admirado arte y patrimonio cultural mundial, si hay algo que no te puedes saltar al visitar Italia, más que el Coliseo o el David de Miguel Ángel, es tomarte una pizza italiana. Sin embargo, como todas las tradiciones, conforme su cultura se va expandiendo y globalizando, la calidad va descendiendo en función de la rapidez y la economía. Todos apreciamos una buena pizza de masa casera pero eso no nos impide comprar las congeladas del súper. Luego nos quejamos de ver como los guiris devoran con admiración paellas congeladas en chiringuitos de medio pelo a las que encima echan kétchup Eso debe ser para un italiano lo que vamos a ver aquí.
Mr. Go es una máquina expendedora de reciente instalación en la mismísima Roma que promete una pizza completa hecha en solo tres minutos, y con ingredientes a elegir.
Desde solo 4,50 euros, uno puede probar una margarita, cuatro quesos, pepperoni o bacon. Sin duda, una herramienta que transforma, definitivamente, la pizza en comida rápida. Aunque quizás esta máquina no hubiese sido noticia de instalarse en otro país, su inauguración en la capital romana ha supuesto una gran polémica. Lo cierto es que no se trata de una máquina de pizza congelada sino que, para mayor ofensa de los pizzeros pero placer de los clientes, sirve una pizza recién hecha. Eso sí, utiliza una masa fermentada con 14 horas de antelación. Una vez elaborada la pizza se puede ver su proceso de horneado a través de un cristal, sirviéndose finalmente en una caja de cartón.
El propietario de la misma, que ha sido tildado por algunos como un auténtico traidor a su país y su cultura, se mantiene orgulloso de su servicio. Si le dejan, no dudamos de que tenga éxito. Lo cierto es que en Roma, si nos dejan elegir, nunca acudiríamos a esta "pizzería" pero, una noche por Madrid, desde luego que la imagen a continuación nos sería más que apetitosa.